Este
ilustre pensador, nace en la Caracas colonial a fines del siglo XVIII.Es una de las mentes mejor organizadas del continente y fue llamado por Pedro
Mártir, el “Nuevo Mundo”.
Era un viajero universal, que tuvo la dicha de conocer diversos
espacios geográficos, de nuestro globo terráqueo, fue un penetrante conocedor
de las sociedades hispanoamericanas, esto lo ubica como maestro y mentor de
Simón Bolívar.
Este
filósofo y pedagogo, es uno de los paradigmas de la educación en Venezuela y
dejó huellas profundas en los demás países de este continente; jamás se doblegó
ante posiciones conservadoras, esto se puede apreciar a su muy corta edad, cuando en 1791 el Concejo Municipal de Caracas, lo admite para ejercer el cargo de maestro en
la escuela de primeras letras, tres años después presenta en ese mismo ayuntamiento sus
reflexiones sobre los defectos que vician la escuela de primeras letras de Caracas.
Tuvo
el honor de moldear la mente de personajes que más tarde fueron grandes figuras
revolucionarias, incluyendo a El Libertador: Simón
Bolívar. El cual más tarde dirá, refiriéndose a Simón Rodríguez, “Usted formó mi corazón para la
libertad, para la justicia, para lo grande, para lo
hermoso yo he seguido el sendero que usted me señaló”.
A
Simón Rodríguez le llama mucho la atención los cambios producidos por la
ilustración y cerró filas en las luchas revolucionarias de Gual y España, ese
mismo año en Kingston (Jamaica) cambió su
nombre por el de Samuel Robinson.
En
Italia Simón Bolívar lo localiza y produce su Célebre juramento: "Juro delante de usted, juro por el Dios
de mis padres, juro por ellos, juro por mi honor y juro por mi patria, que no
daré descanso a mi brazo, ni reposo a mi alma, hasta que no haya roto las
cadenas que nos oprimen por voluntad del poder español”.
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